EL ORDEN DIGITAL

jueves, 6 de agosto de 2009

INGRESOS Y GASTOS DE LOS HABITANTES DE SANTA CRUZ EN UN ANALISIS DE IRENE STUR

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Ingresos vs. Calidad de vida
Existe una marcada brecha salarial en la provinciaEl salario más alto quintuplica al más bajo en Santa Cruz. Medido de punta a punta, el sueldo promedio es de 5.180 pesos, pero si promediamos la incidencia de la masa laboral, esa cuenta baja hasta los 3.701 pesos. En el último año, la pobreza llegó al 7,9%.

Argentina no es un país pobre. El ingreso promedio de los argentinos se encuentra en un rango medio, superando a los chilenos, uruguayos y brasileños, sin embargo a la hora de medir la calidad de vida, las cosas cambian. Las privaciones que sufren algunos medios de la sociedad argentina son asimilables a las padecidas por los habitantes más pobres del planeta.
En nuestra provincia las cosas no llegan a tales asimetrías, aunque ponderado con el costo de la canasta básica promedio, hoy en Santa Cruz según el Instituto Argentino para el Desarrollo de las Economías Regionales (IADER) la pobreza recalculada se ubicó en 7,9 por ciento al primer semestre del 2009. Muy por encima de los índices del INDEC por el que apenas se supera el 1,5 %.
Pese a que nuestro territorio muestra que Santa Cruz es la jurisdicción más rica de Argentina, en términos per cápita, toda vez que el ingreso por habitante es quince veces superior al que tiene Chaco, el distrito más pobre, en lo cotidiano esto no se vive de la misma manera.
El Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) hizo un repaso de las disparidades regionales. Analizaron así el número de personas con necesidades básicas insatisfechas. Estos son los hogares que presentan al menos una de las siguientes condiciones: hacinamiento (viven más de tres personas por cuarto), vivienda inconveniente (por ejemplo inquilinato), hogares sin baño, hogares que tienen al menos un hijo sin asistir a la escuela o que tienen cuatro o más personas por integrante ocupado.
Santa Cruz, se ve ampliamente beneficiada al pensarla en esos términos. Pero de todas maneras el INTI, puntualiza que “las actividades extractivas (minería, petróleo) dan a algunas provincias con estructuras débiles, ingresos de importancia, pero con escasa distribución en el conjunto de la sociedad” algo que sí se refleja en nuestro territorio.
Cuando la crisis arrecia una de las señales que marcan el grado de la misma es el cambio de hábito en el consumo de la población. El promedio salarial señala no sólo el estándar de vida de una sociedad sino también termina marcando la diferencia entre la gente de acuerdo al dinero que desembolsa para vivir.
Según un análisis de abeceb.com sobre los indicadores de demanda en las provincias se puede observar que las jurisdicciones de Patagonia y Capital Federal presentan un alto nivel de consumo, en comparación con el resto del país.
La diferenciación en relación a los ingresos, también es mostrado como algo más notable entre una región y otra.
En el primer trimestre de 2009, el salario promedio del sector privado se ubicó en 2.900 pesos en todo el país. Por provincia, Santa Cruz aparece con un salario promedio de 5.180 pesos, liderando el ranking de provincias, ostentando así casi tres veces el salario promedio de quién está en la otra punta de la tabla, Santiago del Estero, con 1.887 pesos.
Sin embargo ese promedio, tomado entre el salario más alto (el petrolero) y el salario más bajo (el mercantil) no es exacto, a la hora de ponderar la fuerza laboral de unos y otros.
Dentro de la provincia se convive con niveles remunerativos que medidos entre puntas, una brecha que llega a ser casi de cinco veces, cambiando así, rotundamente las realidades que viven unos y otros.
Hoy el salario promedio en Santa Cruz es similar entre lo privado y lo público.
El empleado público estatal, es hoy el 50% de la fuerza laboral en Santa Cruz, algo que fue reconocido este viernes en la Cámara de Diputados por el legislador de Caleta Olivia, Eugenio Quiroga, cuando afirmó que “de la totalidad de la gente en condiciones de trabajar, el 52% lo hace dependiendo del Estado). Esto se condice con los 52 mil recibos, que asegura el Ministerio de Economía, son afrontados con los dineros del Tesoro provincial, a los que se les sumarían los estatales nacionales. El salario promedio estatal está en los 3.500 pesos.
Pero el informe de la Consultora Abece se refiere, específicamente al salario privado.
Si consideramos ambas puntas, el salario coincide con el planteado por la consultora: $ 5.180,00.
Ahora bien, si observamos que los petroleros que hoy ganan alrededor de unos 10 mil pesos (sin tener en cuenta esta debacle que dejó a cientos en sus casas cobrando sólo el salario básico que orilla los 4 mil pesos) son aproximadamente unas 7 mil almas, mientras que en la otra punta, están los mercantiles, cuyo salario promedio es de $2.200 pesos y que al decir del presidente de la Federación Económica de Santa Cruz, Daniel Cruces, llegan a 36 mil los empleados de comercio, la ponderación del promedio varía.
En el medio están los obreros de la construcción, de la minería, de la pesca, la alimentación y otros rubros que en general promedian los 4 mil pesos mensuales.
De esta forma, el salario promedio privado en Santa Cruz se ubica en 3701 pesos bastante lejos de los 5.180 a los que se llega, promediando el salario más bajo y el más alto.


Costo vs. consumo
Los santacruceños tienen un alto nivel de consumo, que está íntimamente relacionado con su costo de vida. Alquileres, alimentos, vestimenta, educación. En su conjunto demandan la totalidad, en la mayoría de los casos, del ingreso familiar. Esto dio que, pese al crecimiento salarial que existió durante el 2008, entre fines de ese año y principios de este, se disparan todos los indicadores de déficit de consumo.
Un fenómeno que se repitió a nivel nacional, dónde la no compra o sustitución de la comida trepó en un 55% de los hogares y la reducción en la compra de ropa llegó al 49%.
Esa caída de consumo en el país, también se evidenció en otros indicadores del gasto, como el dejar de ir al médico o al dentista, o por ejemplo el retrasarse o no pagar algún impuesto o servicio, por igual motivo: la falta de dinero. Algo que, según declaró el propio secretario de Gobierno del Municipio de Río Gallegos, afectó, considerablemente, la recaudación impositiva local. “La gente prioriza los gastos y lo último que paga son los impuestos” dijo Ernesto Cruz.
Obviamente, la variación de estos indicadores no es homogénea en el conjunto de la población, debido a que tampoco lo es la distribución de bienes y servicios en los distintos segmentos sociales. Así como en los sectores más postergados se deja de comprar determinados tipos de alimentos o ropa, en los de mayor poder adquisitivo se sustituyen marcas y disminuye la calidad de lo que se consume.
En este sentido, es necesario destacar que los contextos sociales volátiles y con alto grado de incertidumbre impactan fuertemente en las expectativas, los temores y el estado general del ánimo de la población.
Según el Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la Universidad Católica Argentina (UCA) hay dos temores que están presentes, en mayor o menor grado en el conjunto de la sociedad: la pérdida del empleo y la vivienda. Aspectos fundamentales en la sensación de seguridad y estabilidad de las personas.
En esto podemos encontrar corroboración de dichos miedos en las encuestas que previo a las elecciones los candidatos manejaban, dónde la necesidad del empleo o el temor a perderlo figuraba al tope de las preocupaciones de los santacruceños.
Así los consumos mínimos, las capacidades de ahorro, el acceso a recursos de inclusión, la situación laboral e incluso el nivel de confianza en lo político-institucional, entre otros indicadores, se erigen hoy en señales de alerta. El país y con él Santa Cruz, está lejos de una crisis como la que se vivió en el 2001-2002, pero ello no implica que hoy existan en la provincia sectores más vulnerables que hace un año atrás. La crisis pesquera, la falta de inversión petrolera, la caída del sector mercantil y la delicada situación financiera del Estado provincial dan cuenta de ello.


Irene Stur
irenestur@hotmail.com

LA OPINION AUSTRAL

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